Familias

El área de Educación Musical  pretende contribuir al  desarrollo integral como persona. La percepción y la expresión musical es otro medio más con los que se aprenden, se expresan y se comunican aspectos de la realidad exterior y del mundo interior de cada uno.
Trataremos de conseguir, entre otras cosas, que lleguen a la música desde la experiencia activa y desarrollen, a la vez, su capacidad de socialización.

¿Cómo pueden colaborar las madres y los padres en el logro de estos objetivos?

Fundamentalmente, valorando la educación artística dentro de la formación integral de la personalidad de sus hijas e hijos.
Los pequeños progresos han de ser premiados, estimulándolos y animándolos en la exigencia de calidad de sus propias producciones y de otras cooperativas.
Es necesario facilitarles materiales necesarios en clase y proporcionarles el instrumento musical básico personal que necesitarán una flauta dulce soprano. Conviene que sea de calidad –no quiere decir que sea cara-, y habrá que exhortarlos a que la cuiden.
Ha de animarse a que escuchen música de calidad en casa, reflexionando sobre la contaminación sonora y el consumismo musical.
Es muy importante acompañar a los niños/as a manifestaciones artísticas y musicales de la localidad.
Y, ¿ por qué no?, también es positivo permitirles que ensayen en casa esa pieza musical que aún “no suena del todo bien”, pero en la que ponen tanto empeño y constancia.



ESCUCHAR   PARA   APRENDER
Muchas veces no sabemos qué es lo más adecuado para que vean y escuchen nuestros hijos. 
Aquí podrán encontrar algunas recomendaciones.




El conciertazo

El cohete musical (aprender canciones infantil)

Las tres mellizas

El rincón de los niños RNE

Cuenta cuentos RNE




Implicarse no puede significar hacerle los deberes al alumno. “El padre, la madre, se tiene que poner en la posición del entrenador. Un entrenador no corre con el jugador ni tiene que comer las mismas calorías, ni, por supuesto, sufrir sus lesiones. Un entrenador tiene dos funciones fundamentales: organizar y asesorar con el objetivo de mejorar el rendimiento”, argumentan personas expertas en educación.
















Es importante insistir en la necesidad de escuchar atentamente las explicaciones del profesorado en la clase, de preguntar lo que no se entienda en el aula y de trabajar diariamente para adquirir los buenos hábitos de los buenos estudiantes.




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